jueves, 26 de septiembre de 2013

Capítulo 13: Apoyo

Narra Carla

Otro nuevo día empezaba y no me apetecía nada ir al colegio, y menos aún sola ya que mi prima estaba en el hospital pero por lo menos me llevaba mi primo. No desayuné y ya íbamos en el coche cuando un mensaje de Niall interrumpió mis pensamientos: "te espero en la entrada", no le contesté y apagué el móvil. Estaba muy pesado y odiaba a los tíos así, por lo que pasaría de él, además que no tenía ganas de nada, sólo estaba cabreada. Me despedí de Lou y al entrar al edificio allí estaba el rubio.
-Buenos días- dijo antes de besar mi mejilla.
-Hola- dije seca.
-Vaya, parece que no son tan buenos días para ti. Ayer te llamé y no me contestaste, ¿estás bien?- no me gustaba que las personas se preocuparan de mí, por lo que me aburrían tantas preguntas.
-Sí- contesté al entrar a nuestra clase. Pasé y tiré mi mochila en la mesa. Estaba de tan mal humor que mataría a todos los que jodieron a Sonia ayer, ahora mismo.
-Vaya, ¿qué le ha pasado a Tomlinson?- preguntó Dave, uno de los imbéciles de ayer.
-Le ha dado miedo venir seguro- dijo Nicole, otra idiota.
-¿En serio os atrevéis a preguntar? ¡¿En serio?!- grité- Podéis ir a moriros un rato todos, en serio.
-¿Pero por qué tan violenta, Stone?- preguntó Dylan.
-¡Porque sois todos unos imbéciles que no tenéis nada más qué hacer que joder a los demás! Ojalá os muráis todos, joder.
-Eh, eh, Carla, relájate.
-A mí ni me hables, Styles. Eres el mayor gilipollas que he conocido en toda mi vida. Fuiste tú el que empezó a joder ayer a Sonia, así que cállate- dije esto último con intenciones de irme a mi mesa.
-¡A mí no me grites! ¡Tú eres la cualquiera aquí por acostarte con el primero que ves!- nada más decir eso una cachetada fue a parar a su mejilla.
-El cualquiera aquí eres tu que fuiste el primero en acostarte con cualquier puta, yo por lo menos conocía al chico. ¡Y no estoy discutiendo sobre eso sino por cómo te burlaste de mí prima! ¡Por tu culpa pasó todo lo que pasó!
-¡¿Y qué pasó?!
-Ese no es tú problema.
-¡¿Que es que ahora cubres y defiendes a tu querida prima cuando eras tú la primera que se reía de ella?! ¡Eres patética igual que ella!
-¡Cállate! ¡Por tú culpa y del resto de idiotas mi prima intentó suicidarse ayer!- grité provocando un silencio y que toda la clase lo escuchara.
-¡¿Que Sonia qué?!- preguntó Liam nervioso.

Narra Sonia

Abrazada a Lou me quedé durmiendo. Por la mañana me despertó el médico para hacerme unas revisiones y estuve sola hasta después de comer que llegó Lou para hacerme compañía. Me contó que mi madre había estado aquí con Mark por la noche, pero no quisieron despertarme y que después vendría con las niñas.
Me estaba quedando dormida cuando se abrió de nuevo la puerta y entró mi madre que al verme se echó a llorar. Vino hasta mi y comenzó a besar mi cara.
-Mamá yo, lo siento- dije
-No Sonia no, la que lo siente soy yo, debí darme cuenta y no lo hice
-No mamá, yo no quise que tu te enteraras
-Ven aquí anda- se acercó de nuevo y me abrazó- ¿Como estas?
-Cansada, pero bien, si no llega a ser por Carla.....
-Louis deberías despejarte un poco- le aconsejó mi madre- porque no sales fuera y le dices a las pequeñas que entren y te quedas con las dos mayores, están bastante alteradas
A regañadientes Lou hizo caso a mi madre, y nada más salir él entraron las dos pequeñas, que se subieron corriendo a mi cama.
-Niñas cuidado- les advirtió mi madre
-¿Como estas Soni?- pregunto Phoebe
-Mamá nos dijo que comiste algo que te hizo daño- Acabó Daisy, miré a mi madre, la cual me dedicó una sonrisa cómplice, era mejor que ellas no supieran la verdad
-Estoy bien peques, en unos días estoy en casa
-Mejor porque nos tienes que ayudar con mates, nuestra profesora cada vez nos pone las cosas más difíciles.
-Phoebe tiene razón, y claro Lou no tiene ni idea de mates y Lottie y Fizzy pasan de nosotras.
-Hacemos una cosa, si mañana no estoy en casa por la tarde os traéis las cosas y yo os ayudo, así me hacéis compañía
-Siiiii!!- gritaron las dos a la vez
-Y así te cuidamos- finalizó Daisiy
-Chicas decirles a vuestras hermanas que pasen y os quedáis las dos fuera con Lou- Les ordenó mi madre, las dos me abrazaron y ellas obedecieron. Mis otras dos hermanas entraron a la habitación pero ellas no fueron tan efusivas, saludaron con un simple "hola" y se quedaron a los pies de mi cama mirándome, como si tuvieran miedo.
-¿Mamá nos puedes dejar solas?- Al parecer mis hermanas si que sabían la realidad y prefería ser yo las que les explicase todo. Mi madre se fue dejándonos así a las tres solas.
-Chicas no muerdo- dije sonriendo- Sigo siendo yo.- Vi como Lottie comenzaba a llorar- Eh, eh, ven aquí anda- dije y se acercó a mi lo que me permitió abrazarla- Fizzy ven sentaos aquí conmigo- me hizo caso y ambas se sentaron conmigo en la cama.
-¿Porque lo hiciste Soni?- preguntó Fizzy
-¿Te hemos hecho algo?- esta vez fue Lottie la que preguntaba secándose las lágrimas. Me estaba dando cuenta de que con esto solo había conseguido hacer sentir culpable a quien no quería que se sintiera así.
-Chicas, no habéis sido vosotras para nada, vosotras sois uno de los poco motivos que me quedaban para no morir, pero pasaron cosas que me nublaron y olvidé todos esos motivos, que aunque son pocos, valen lo suficiente como para luchar un poco mas. No quiero veros tristes, estoy bien, voy a salir de aquí pronto y estaré con vosotras en casa.
-Soni por favor, no olvides nunca que te queremos y no solo nosotras, Mamá, Mark, las pequeñas y sobretodo Lou, sabes que si nos pasa algo a alguna de nosotras Lou no podría seguir adelante y nosotras tampoco. Eres la mejor hermana que podemos tener- dijo Lottie y de nuevo se abalanzaron sobre mi para abrazarme. Pero ese abrazo se vio interrumpido por la puerta de la habitación. Levanté la mirada esperando encontrarme con mi madre, pero no era ella.

Narra Carla

Acabó el colegio y como siempre, estaba esperando a Lou para que me llevara a casa cuando apareció corriendo y estresado.
-¡Hola, Carla!
-Lou, tranquilo- dije riendo levemente- ¿Estás bien?
-Sí, bueno, nervioso. Voy al hospital ahora mismo, ¿vienes?
-La verdad, ahora no, Lou. Iré luego, no me gustan los hospitales, ve tu.
-¿Pero cómo te vas a casa? Ven, yo te llevo.
-No, tranquilo, tu vete y come algo- él me sonrió, besó mi cabeza y se fue. La verdad es que me apetecía caminar, necesitaba despejarme. Y eso hice hasta que sentí que alguien me cogía de la mano.
-Ah, hola, Niall.
-Siento lo de Sonia, Carla, no sabía nada.
-Tranquilo, no te preocupes- sonrió.
-¿Quieres que te acompañe a casa?- le miré dudosa- Tenemos que hablar, Carla, aún no hemos hablado sobre, ya sabes, eso. El otro día que te escapaste no te encontré.
-Pero no hay nada de qué hablar, Niall. Bebimos, nos emborrachamos, nos besamos y pasó, no hay más.
-Ya, pero..
-No hay nada, Niall. Que nos hayamos acostado no significa nada, olvídalo.
-A ver, Carla..
-¡Que no!
-Mira, déjalo así, está bien, tienes razón, fue sólo sexo y nada más, dejémoslo así.
-Me parece bien- dije antes de darme la vuelta para irme a casa.
-Pero espera- me di la vuelta- La semana que viene hay examen de matemáticas, llámame si necesitas ayuda- asentí y me fui. Qué pesado llegaba a ser, pero no podía evitar pensar en lo que había pasado esa noche, ¿sólo había sido sexo? ¿O había significado algo más para mí? No, no lo creo, o... no, de ninguna manera.
Seguí caminando y una llamada me distrajo, como fuera Niall iba a matarle, pero no, no era él.
-¿Hola?
-¡Carla!
-¡Zayn!- grité haciendo que todas las personas de la calle me miraran- ¿Qué tal estás? ¡Siglos sin hablar contigo!
-Pues muy bien, y tengo una sorpresa para ti. Una gran sorpresa.
-¿Una gran sorpresa? ¡Cuenta!
-Este viernes iré a Doncaster.
-¡¿Qué?! ¡Me muero! Dios, Zayn, no sabes qué ganas de verte, ¿te quedarás aquí no?
-Bueno, no sé porque voy con mamá porque debe hacer unas cosas por el trabajo y tal..
-¡Da igual, os venís todos!- rió.
-Tengo que dejarte, Carli, pero te veré dentro de unos días. Te quiero.
-¡Adiós, Zayn!
Qué felicidad me había dado mi mejor amigo, después de varios días, al fin le vería.

Narra Sonia

Cuando lo vi parado en la puerta me cambió la cara por completo. ¿Era él? o ¿era un espejismo producido por los medicamentos?
-Soni, nosotras vamos fuera, si nos necesitas que salga él a buscarnos- Dijo Fizzy. Acto seguido ambas me dieron un beso en la mejilla y salieron por la puerta.
-Hola- Dijo Liam acercándose poco a poco hasta donde estaba
-Hola- le dije triste
-Así que es verdad- me encogí de hombros
-Liam si has venido por pena, de verdad vete, no te culpo de nada, y ya me cuida mi familia, no hice esto para dar pena a nadie.
-Sonia ¿que narices estas diciendo?
-Vamos, deja de fingir Liam, por favor, tus amigos me lo dejaron bien claro ayer
-No se que coño te dijeron, pero fuese lo que fuese no era cierto, he venido porque de verdad me apetecía verte
-¿Quien te dijo donde estaba?
-Carla, hoy discutió con Harry y con el resto por lo que te hicieron, y cuando dijo lo que habías intentado hablé con ella para saber donde estabas.
-¿De verdad Carla se enfrentó a ellos?
-De verdad, les dejó las cosas claras
-Tiene carácter- dije y reí un poco
-¿Como estas?- preguntó mientras se sentaba en el sillón de la habitación
-Bien, me tienen aquí controlada, no puedo moverme sin que las enfermeras se enteren
-¿Ni siquiera ir al baño?- dijo en tono de broma
-Ni siquiera girarme en la cama- Los dos reímos y vi como a él se le achinaban esos ojos que tenía....Sonia para, no es el momento
-Oye Sonia prométeme algo
-¿El que?
-No vas a volver a intentarlo, ni siquiera a pensar en ello, sé que nosotros no somos amigos ni nada por el estilo, pero cuando me enteré de esto, sentí una gran presión en mi pecho, me asusté de no poder conocerte, quiero que cuentes conmigo
-Liam a partir de hoy, para mi eres un amigo- Liam se levantó y me abrazó, se sentía bien estar entre sus brazos, me sentía protegida y es como si todo alrededor desapareciera. Quería tenerlo como amigo.
Liam se separó del abrazo, pero no de mi, clavó sus ojos en los míos y comenzó a acercarse lentamente, notaba su aliento sobre mi boca, su nariz casi rozaba la mía, mis ojos no podían dejar de mirar sus labios. Liam acarició mi mejilla con su pulgar y pasó su mano por detrás de mi nuca, yo también empecé a dejar que mi cabeza se acercara a la suya...
-He venido para que no pienses que te odio aunque bueno.. Uy... Lo siento... Yo.. ¡Yo me voy!-apareció mi prima en el momento mas indicado.
-No Carla no te vayas, yo, ya me iba- Liam se separó de mi cogió su chaqueta que estaba en el sillón, me dio un beso en la mejilla y se fue.
-Vaya, vaya...- dijo.
-Si no fuera porque ayer me salvaste la vida y Liam me ha contado lo que ha pasado hoy en clase, tendría ganas de matarte
-Oh, qué adorable. ¿Qué tal estás?
-Bien- le dediqué una pequeña sonrisa- ¿tu?
-Muy contenta, la verdad.
-¿Niall tiene algo que ver?
-¿Por qué Niall tendría que ver en eso?
-Aish no se, no se....solo son cosas que se me pasan por la cabeza
-Pues no- rió levemente- Mi mejor amigo Zayn viene este fin de semana.
-¿Al fin conoceré al misterioso Zayn? Si me dejan salir de aquí claro- dije mirando con asco la habitación
-Pues ojalá le conozcas, te caería bien.
-Me encantaría

Hola holita, ya tenéis aquí el nuevo capítulo este un poco más tranquilo que el anterior, pero estamos contentas de que os gustara. Una vez mas gracias por ser las mejores lectoras y esperamos vuestros comentarios que nos enamoran. Os queremos ♥

lunes, 23 de septiembre de 2013

Capítulo 12: Sueño eterno

*ADVERTENCIA: Este capítulo puede herir sensibilidades y recordamos que todo lo que ocurre aquí es ficción.

Narra Sonia

Esa misma tarde Louis llamó a Liam, el cual le dijo que no podía venir, pero le prometí a mi hermano que al día siguiente iría a hablar con él. Y a eso me disponía en ese momento, miré por todos los lados, pero no estaba en ninguna parte, tomé aire e hice lo que hacía tiempo que no me atrevía a hacer, acercarme al grupo que formaban todos menos yo en clase. Toqué el hombro del que mas conocía en ese momento allí presente, Harry, el cual se giró y me miró con mala cara.
-¿Que pasa ahora Tomlinson? ¿Se te ha olvidado el cuaderno en casa y vienes a pedir uno?- todos rieron ante su comentario.
-No, me.....me...- me costaba mucho hablar con él- me gustaría saber donde está Liam, no lo he visto por aquí
-¿Para que quieres saberlo?
-Solo...solo me apetecía saludarlo nada mas- Harry caminó a mi alrededor hasta ponerse detrás mía y me dio un pequeño empujón hacía el centro del círculo que formaban.
-Solo a saludarlo ¿no?- asentí con la cabeza- Sonia vamos a ser claros. Deja a Liam tranquilo, a él no le importas- dijo Harry lo que provocó un pinchazo en mi pecho- Alguien me cogió del hombro y me giró bruscamente para que la mirara, una chica morena me miró a los ojos y comenzó a reírse.
-¿Acaso de verdad has llegado a creer que le importas?- volvió a reír- Madura Tomlinson él solo se acerca a ti por pena, es demasiado bueno.
-En serio niñita, déjalo en paz- esta vez era un chico el que me giró para mirarme- No queremos verlo contigo de nuevo ¿entendido?- dijo y me dio un pequeño empujón, seguido de otro a mi espalda. Todos reían mientras mi cuerpo iba de un lado al otro del circulo, hasta que uno de sus pies me hizo caer al suelo.
-¿Pero qué cojones estáis haciendo?- esa voz, no me la esperaba para nada. Era Carla, que venía con Niall detrás.
-Eh, Stone, tú no eres admitida aquí, vete.
-Os calláis la puta boca y dejáis a Sonia en paz.
-¿Y quién eres tu para decirnos qué hacer?- preguntó Harry.
-Soy su prima y si alguien puede meterse con ella soy yo, nadie más. ¡Dejarla en paz e iros de aquí!- gritó bastante enfadada logrando que se fueran.
Mientras mi prima despejaba la zona Niall me dio la mano para ayudarme a levantarme del suelo. Miré extrañada a los dos y di una gran bocanada de aire para intentar evitar las lágrimas que se agolpaban en mis ojos.
-¿Carla a que ha venido esto?- Mi prima me miro aún con cara de enfadada pero negó con la cabeza.
-Ya hablaremos de eso- y se fue otra vez con Niall.

El profesor no tardó en llegar, lo que hizo que todos volviéramos a nuestros sitios. Carla siguió como siempre durante el resto del día mientras que el resto de la clase me dedicaba miradas como jurándome que esto no había acabado allí, que no iban permitirme acercarme a uno de sus amigos, pero después de lo que me había dicho no sabia si ni siquiera yo quería acercarme.
Al salir de las clases Carla y yo nos fuimos solas a casa ya que Louis había prometido a mis hermanas que las iba a recoger para llevarlas a comer. Cuando llegamos dejamos las mochilas por allí y vimos la comida preparada ya encima de la mesa, al parecer la había dejado mi madre antes de irse a trabajar. Nos sentamos una en frente de la otra y comenzamos a comer en silencio, pero había una duda que rondaba mi cabeza y que necesitaba una respuesta.
-Carla ¿porque lo has hecho?
-Déjalo así, Sonia, no tiene importancia- dijo mientras apenas comía.
-No, no puedo dejarlo, no lo comprendo, sé que me odias, no entiendo porque lo hiciste
-Porque sí, y punto. Déjalo así.
-Necesito saberlo
-Joder, Sonia, qué pesada eres, tía, que no tiene importancia, ¡que lo dejes! - Dejé mi plato tal y como estaba y me fui al aseo que teníamos arriba, me encerré y me senté tras la puerta, ¿y si todos tenían razón?, ¿y si al fin y al cabo era yo la que espantaba a la gente?, de esa manera viviría toda mi vida sola. Al parecer Liam se acercaba a mi solo por pena, toda mi clase me odia, hoy lo habían dejado bien claro, y Carla, pese a lo de hoy sé que tampoco me tenía mucho mas cariño que la gente de mi clase. Me quedaba mi familia, en especial Lou, pero estaba cansada, cansada de ser una carga para él, de que siempre tuviera que estar pendiente de mi. Alcé la mirada y vi el pequeño botiquín casero que teníamos colgado al lado de espejo, lo abrí y comencé a sacar todas las pastillas que allí había, tras darle muchas vueltas, había llegado a la conclusión de que lo mejor era quitarme de en medio, no quería sufrir mas y por encima de todo no quería hacer sufrir a los que estaban a mi alrededor. Puse en mi mano todas las pastillas que pude y me las fui tomando una a una mientras me veía llorar en el espejo, hasta para eso estaba siendo una cobarde. Cuando tomé la última me senté con la espalda pegada a la bañera y entre llantos comenzó a llegar el sueño, el sueño que esperaba, fuera eterno.

Narra Carla

La conversación con mi prima me había cabreado mucho, odiaba que fuera tan pesada, que insistiera tanto en las cosas, pero esa era su forma de ser, y nada más podía hacer. No sabía por qué había hecho eso hoy en clase, pero lo había hecho interrumpiendo así mi discusión con Niall, el cual se ponía muy pesado, pero eso era otra cosa que ya os contaré. No comí casi y fui a coger ropa para ir a ducharme porque necesitaba relajarme un rato. Fui hasta el baño y estaba ocupado, toqué varias veces y Sonia no abría, joder.
-Sonia, abre, llevas años ahí- nadie contestaba- ¡Sonia, joder!- di patadas a la puerta pero nada, y ya comenzaba a preocuparme un poco. Empecé a desesperarme por abrir la puerta pero recordé mis trucos para abrir puertas que había aprendido al robar, de algo me servían mis andanzas por el mal camino. Cogí una tarjeta y abrí la puerta encontrándome con mi prima inconsciente en el suelo, lo único que alcancé a hacer fue llevarme las manos a la boca.
Me agaché hasta ponerme a la altura de Sonia y observé hacia su alrededor y vi un montón de pastillas en el suelo. Joder, esto no podía estar pasando. No sabía qué hacer así que la moví varias veces hasta darle leves golpes en la cara, pero nada. Me levanté corriendo y llamé a la ambulancia. Volví al baño y estaba abriendo los ojos poco a poco, cosa que agradecí. Nada más mirar a su alrededor comenzó a llorar, cosa que me rompió el corazón.
-Sonia, ya, no llores.
-Soy tan fracasada que ni siquiera consigo morir, doy asco Carla- dijo sollozando
-No, no digas eso. ¿Por qué lo has hecho, tía? Hay gente que te ama, no puedes dejarles.
-Solo les hago sufrir, mejor dejarles
-No, Sonia, en realidad no lo hiciste por eso, sino por esas personas que te hacen la vida imposible. Esa gente no merece tus lágrimas, no merecen que te quites la vida, no merecen que estés así amargándote la existencia por personas que sólo viven para joder a los demás porque sus vidas son tan tristes e insignificantes que para sentirse vivos tienen que hacer llorar a los demás, pero no a estos extremos. Y en todas esas personas malas, me incluyo- mi prima iba a contestar cuando tocaron la puerta en señal de que la ambulancia había llegado.

Narra Sonia

Las palabras de mi prima me habían llegado, parecía realmente asustada y arrepentida. Carla no me dejo contestarle, ya que habían tocado a la puerta y en menos de un minuto dos hombres, al parecer médicos de ambulancia aparecieron por la puerta del baño. uno de ellos se arrodilló a mi lado y empezó a alumbrar mis ojos con una pequeña linterna mientras el otro observaba las cajas de las pastillas que me acaba de ingerir.
-Tienen las pupilas muy dilatadas- dijo el que estaba a mi lado, yo aun seguía medio atontada y Carla miraba desde la puerta
-Hay que llevársela y hacerle un lavado de estómago, rápido- contestó el otro. Intentaron que fuera por mi propio pie pero no me quedaban fuerzas por lo que decidieron bajarme en camilla. Cuando pasé al lado de mi prima le tendí la mano
-Carla por favor no me dejes sola- ella se quedó paralizada en el momento
-No lo haré.
-Puedes venir si quieres, pero rápido- le dijo uno de los médicos
-Sí, vamos.- Subimos a la ambulancia y en unos minutos estábamos en el hospital. Carla no se separó de mi hasta que los médicos no la dejaron pasar. A mi alrededor todos corrían y solo oía cosas como "ha intentado suicidarse" y "que puede llevar a una chica de su edad hasta estos extremos". No se muy bien lo que me hicieron solo se que no podía parar de vomitar, al parecer esto era el famoso "lavado de estómago". una mujer no muy mayor se acercó hasta mi.
-Todo pasó, vas a estar bien- Es lo último que recuerdo antes de volver a dormir

Narra Carla

Estaba en la sala de espera mientras rogaba para que alguien viniese a decirme qué tal estaba mi prima. Estaba en shock, estaba mal, y muy preocupada. No podía creer que Sonia hubiera llegado a estos extremos. No sólo la gente se metía con ella sino que tenía una gran depresión, además de que yo también la jodía mucho, pero era por lo que le había dicho antes. Mi vida había sido una gran mierda, un pasado tan horrible y oscuro que sólo me sentía bien haciendo daño a los demás, daño que a mí me habían hecho toda la vida y que gracias a eso llevaba un gran dolor en el pecho. Decidí llamar a Lou ya que debía enterarse ya, aunque no sabía muy bien cómo hacerlo.
-Si?
-Hola, Lou.
-¿Carla?
-S..Sí. ¿Dónde estás?
-Estoy con las pequeñas en un parque ¿porque?
-Lou, estoy en el hospital
-¿QUE? ¿Que te ha pasado? Carla joder ya te dije que no era buena la bebida
-No, no soy yo, es.. Es Sonia.
-¿Que ha pasado?- dijo algo asustado
-S..Sonia ha... ha intentado suicidarse, Lou.
-NO! No puede ser mi hermana no ha podido hacer eso
-Louis, tienes que venir ya, estoy sola y no puedo soportar esto sólo yo. Ven, por favor.
-Vale dame diez minutos, dejo a las niñas en casa y voy para allá. No llames a mi madre aun, luego lo haré yo.
-Vale, pero, Louis, date prisa.
-Estoy yendo. CHICAS NOS VAMOS!!!- oí como llamaba a mis primas y luego colgaba, seguramente aun estaría en shock y no había terminado de asimilar la información.
Guardé el móvil y me levanté de la silla. No sabía qué hacer, quería saber cómo estaba y que todo esto ya pasará, era tan horrible toda esta agonía.
El tiempo fue pasando hasta que Louis apareció corriendo, y nada más verme me abrazó. Hacía tanto tiempo que nadie me abrazaba, y la verdad es que lo necesitaba tanto...
-¿Que ha pasado Carla?- dijo mientras frotaba mi espalda
-Se ha encerrado en el baño y se tomó todas las pastillas que vio.
-JODER!!!- Lou me soltó y se sentó en una de las sillas para apoyar sus codos en las rodillas y la cabeza en sus manos- Es mi culpa, debería haberme dado cuenta antes, o contárselo a mi madre, o hacer algo
-No, no es tu culpa, no te culpes, de verdad.
-Es que no lo entiendo, parecía feliz, hoy iba a hablar con Liam y todo
-No todo es lo que parece..- dije y me crucé de brazos mientras caminaba por la sala.
-Carla ¿tu como estas?
-¿Por qué me lo preguntas?
-No soy tonto, y sé que esto te ha afectado
-Yo.. Yo.. No..- no acabe de hablar y lo agradecí ya que apareció el doctor, al fin.
-¿Familiares de Sonia Tomlinson?
-Somos nosotros- dije.
-¿Quiénes sois?
-Soy su hermano mayor, y ella es nuestra prima, estaba con Sonia cuando todo pasó
-Bien. Pues le hemos hecho un lavado de estómago a Sonia y ahora se ha dormido después de haberle puesto algún calmante porque estaba muy alterada.
-Está bien ¿no corre peligro?
-No, podéis estar tranquilos. Solo debe descansar, además que la dejaremos aquí para tenerla en observación.
-De acuerdo ¿podemos entrar?
-Está dormida ahora, pero si queréis podéis entrar.
-Tengo que llamar a mi madre Carla ¿porque no entras tu mientras tanto?
Dudé un poco ya que no me apetecía entrar pero aún así acepté. Entré en la habitación y allí vi a mi prima conectada a algunas cosas. No os voy a mentir, se me rompió el corazón al verla así.

Narra Sonia

Comencé a abrir poco a poco los ojos, veía aquella habitación blanca algo borrosa, escuchaba un pitido que al parecer marcaba los latidos de mi corazón, el mismo que había intentado parar con esas pastillas. Intenté moverme pero me dolía todo, estaba demasiado cansada. Giré mi cabeza y Carla estaba sentada en un sillón al lado de mi cama mirando por la ventana.
-No te has ido- dije con la voz aun ronca
-¿Por qué iba a hacerlo?- pregunto. Cerré fuerte mi ojos no sabia la respuesta a esa pregunta.
-Gracias- fué lo único que pude decir. Carla me miró rara pero levemente me sonrió, no entendía nada de esto aunque quizás luego lo entendería.
La puerta de la habitación se abrió y apareció mi hermano, cuando me vio despierta corrió hasta mi cama.
-Sonia!! Joder estas bien- se abalanzó sobre mi y yo hice un leve gesto de dolor
-Lou! pesas- dije
-Ay dios!- dijo Louis levantándose- lo siento, lo siento
-Louis, cálmate- le dijo mi prima. Louis corrió hacia ella y la abrazó
-Carla de verdad, gracias, si no fuera por ti....-dijo y las lágrimas se agolparon de nuevo en mis ojos.
-Nada de esto hubiera pasado si yo no hubiese llegado a vuestras vidas- dijo y se separó de Louis para salir por la puerta. Intenté levantarme para ir tras ella, pero las maquinas conectadas a mi cuerpo me lo impedían.
-Lou por favor ve a por ella, es cierto que me ha hecho daño, pero ella no es la culpable de esto, sabes que ya estaba mal antes de que llegara.- mi hermano se sentó al lado mio en la cama y acarició mi pelo
-Tranquila, volverá, necesita su tiempo para asimilar todo lo que ha pasado y tu misma podrás decírselo. No llores mas por favor- besó mi frente- Estamos contigo pequeña
Tras un rato de silencio Louis se incorporó para mirarme a la cara.
-¿Porque lo has hecho?
-No aguantaba mas, estoy harta de ser un estorbo
-Eh! Ni se te ocurra decir eso de nuevo. Sonia si te pasa algo jamás me lo perdonaría JAMÁS!- sus ojos estaban brillantes, pocas veces, por no decir ninguna había visto a mi hermano llorar, de nuevo se acercó a mi y me volvió a abrazar
☻☺☻☺☻☺☻☺☻☺☻☺☻☺☻☺☻☺☻☺☻☺☻☺☻☺☻☺☻☺☻☺☻☺☻☺
Aquí os dejamos un capítulo un poquito fuerte, espero que no hayáis llorado por nuestra culpa, pero sobretodo que os haya gustado, ya sabéis que nos encanta leer todas vuestras opiniones, así que ya sabéis. Y si sois nuevas podéis encontrar nuestros Twitter a la derecha de la pagina tanto para opinar como para ser avisadas. Os queremos :)


miércoles, 18 de septiembre de 2013

Capítulo 11: Recuerdos olvidados


Narra Sonia

Llevaba un buen rato buscando a Carla por toda la casa, Louis ni siquiera me miraba, parecía realmente enfadado conmigo y el hecho de no encontrar a mi prima ponía las cosas peor.
-¿Donde se habrá metido?- dije
-No lo sé, pero te recuerdo que habíamos quedado en que la vigilaríamos por el tema del alcohol
-No me puedes echar eso en cara, no soy la niñera de nadie, y he echo lo que he podido
-No voy a discutir aquí y ahora, pero hablaremos de esto
A lo lejos vi a mi prima en la mesa donde estaban las bebidas rellenando su vaso.
-¡Hombre, los pesados!- exclamó riendo mientras caminaba hacia nosotros.
-Carla no estoy para bromas- dijo mi hermano mientras le intentaba coger el vaso de la mano
-Ni se te ocurra, déjame beber, joder- estaba seria pero luego volvió a reír, se notaba muy contenta. Y no sabía por qué.
-Carla nos vamos- dijo Louis
-No, no me da la gana. ¡Y por qué coño lo sabes! ¿Por qué cojones se lo has contado?- preguntó refiriéndose a mí.
-Definitivamente eres idiota ¿que le voy a contar? ¿Crees que me voy a delatar a mi también?
-Hombre, claro. Además, yo no te he obligado a venir. Has querido tu sola.
-Definitivamente el alcohol ha matado las pocas neuronas que tenias- Se empezó a reír a la vez que bebía de su vaso al haber escuchado mis últimas palabras.
-Qué graciosa eres, ¿no?
-Me estáis cabreando ya las dos! Nos vamos y me da igual lo que digas, tu vienes conmigo- dijo Louis refiriéndose a Carla. Se le notaba muy cabreado y me daba miedo que de verdad se cabreara conmigo, al fin y al cabo él era mi mejor, por no decir mi único, amigo además de mi hermano. Carla suspiró pero aceptó que nos fuéramos, eso sí, con su vaso en la mano. Cuando estábamos saliendo la vi que estaba mirando detenidamente a algo, como si estuviera buscando a alguien.
-¿Buscas a alguien? ¿Acaso perdiste a Harry? Mas que nada porque lo vi antes bien acompañado en el jardín, y no eras tu precisamente
-¿Eh? No, no. Venga, vayámonos.- Mi prima estaba rara, y no solo porque iba borracha, porque eso ya lo había visto, pero el no haberse opuesto a Louis y su felicidad me resultaban raro.

Domingo por la mañana desperté mientras mi prima aun dormía, por lo que decidí bajar a desayunar. En la cocina estaba mi hermano sentado en un taburete delante de su bol de cereales, lo imité y me senté en frente de él.
-¿Resaca?- me preguntó con una sonrisa en la cara, yo solo asentí, la verdad es que si que me dolía un poco la cabeza y el cuerpo me pesaba.
Louis simplemente rió y volvió a sus cereales.
-Lou- dije algo asustada, él se limitó a mirarme- Lo siento, de verdad no se porque lo hice, sé que te he decepcionado
-No es que me hayas decepcionado, es que sé que tu no eres así, y no quiero que cambies por nadie, quiero que seas tu
-Pero siendo yo no consigo nada
-Lo harás, date tiempo, pero siempre haciendo lo que de verdad quieras hacer
-Gracias Lou
-No seas tonta enana
-Y.....¿Se lo dirás a mama?
-Por esta vez no, pero prométeme que no lo volverás a hacer
-No lo haré
-¿Quieres que te cuente algo?- asentí- Creo que sé a que se debe la extraña felicidad de Carla anoche
-¿Y me lo piensas decir?
-No se si debería
-Idiota!!- Alargué mi mano para golpearle el hombro
-Vale, vale, me olvidaba de que tengo una hermana agresiva- el mismo se rió de su broma, mientras yo lo miraba atentamente- Al parecer anoche se lo pasó muy bien y no con Harry
-Espera, me estas diciendo que se acostó con otro- asintió- Y tu sabes quien es claro- volvió a asentir- Dímelo!
-Vale, pero me tienes que prometer que no va a salir de aquí y que mucho menos le dirás nada a ella
-Joder Lou ¿a quien se lo voy a contar? Suéltalo ya!
-Con su profesor de matemáticas favorito
-NO!- dije abriendo la boca- ¿Con Niall?- él asintió y se llevó un dedo a la boca para que me callara ya que Carla estaba llegando a la cocina. No me podía creer lo que me acababa de contar Louis ¿con Niall? pero si ayer se le veía demasiado feliz con Harry con promesas de pasar una buena noche, de nuevo mi prima me dejaba descolocada, ¿como era capaz de ser así?, ¿como podía cambiar de opinión y peor aun de chico en media noche? Me encantaría poder preguntárselo, pero le prometí a mi hermano que no le diría nada, y después de que no le contara nada a mamá de mi salida nocturna mejor no jugar con la suerte.

Narra Carla

Había llegado el Lunes y con ello, otro precioso día en mi amado instituto. Entramos al edificio del Hall Cross y pude sentir todas las miradas reflejadas en mí. Miré hacia mi ropa por si tenía algo pero no, así que no entendía nada.
Entramos mi prima y yo a nuestra clase y fue algo más de lo mismo. No entendía por qué todos me miraban demasiado y hablaban de mí, me estaba molestando mucho y quería pegarles a todos.
-¿No has notado nada extraño?- pregunté a mi prima mientras me sentaba en mí mesa.
-¿Yo? No, nada- dijo algo nerviosa
-Que sí, joder. Todos me miran demasiado y no sé..
-No sé Carla, algo habrás hecho- La miré levantando una ceja. ¿Y ésta que coño me decía? Yo no había hecho nada. La gente es idiota sólo.
Pude notar que Harry me miraba realmente mal. Y la que tendría que mirarle así era yo, ya que me había enterado de que había estado con la misma tía del otro día. Qué idiotas son todos, joder.
Las horas pasaron y ya estaba en recreo, y esta vez, sola. Estaba sentada en un banco mirando por ahí mientras pensaba en mí cosas hasta que sentí que alguien se sentaba a mi lado, era Harry.
-De verdad que no te entiendo- le miré con duda, pero dejé que siguiera hablando- ¿Crees que soy idiota? Porque no lo soy.
-¿De qué hablas, Harry?
-¿Cómo que de qué hablo? ¡En serio me lo estás preguntando!
-Primero, no me grites, segundo, no te entiendo, de verdad.
-A ver, Carla, me dices que yo no haga tal cosa, me insultas y me haces sentir mal pero tu eres la primera que hace lo que te da la gana.
-¡¿Quieres explicarte de una puta vez?!- realmente me estaba enfadando mucho, no entendía nada y me estaba poniendo nerviosa.
-Eso debes averiguarlo tu, yo ya dije lo que tenía que decir.
-No, espera, Harry. ¡Harry, joder, ven!- grité pero se fue. No entendía absolutamente nada, no sabía que pasaba, no sé que había hecho pero tenía que enterarme ya, y sabía que mi querida prima lo sabía debido a su reacción ante mi pregunta.
Me levanté para ir hacia su esquina de siempre pero una mano me cogió del brazo, me di la vuelta y el que me faltaba.
-Carla, tenemos que hablar.
-Niall, ahora no, tengo que ir a hablar con mi prima.
-Carla, en serio, es importante. Y sabes a lo que me refiero.
-Eh, no, la verdad es que no lo sé.
-¿Me vacilas?- negué con la cabeza- ¿En serio no te acuerdas de nada?
-¿De qué tendría que acordarme?
-No, de nada. ¿Sabes? Déjalo así- besó mi mejilla y se fue. Estaba raro, estaba demasiado raro, todo el mundo lo estaba, y estaba comenzando a rayarme, por lo que decidí ir donde mi prima donde la encontré escuchando música, como siempre.
-¿Que haces aquí?
-Tengo que hablar contigo, y me da igual si te opones.
-Habla, otra cosa es que yo conteste
-Escucha, Tomlinson. Todo el mundo está raro, no paran de mirarme, de hablar de mí, Harry está enfadado conmigo y Niall muy raro, todos me tratan como si hubiera matado a alguien, y sé que lo sabes así que dime ya qué es. Al escucharme mi prima se quito uno de sus auriculares y me miró con una ceja levantada.
-Me vas a decir que de verdad no te acuerdas de lo que hiciste el sábado en la fiesta
-Dios, otra igual ¡no, no sé nada, por eso estoy aquí!
-¿Porque debería contártelo eh? De nuevo ibas borracha
-Pues porque quiero saberlo. Y sí, eso lo sé.
-Te recuerdo que teníamos una especie de pacto con mi hermano respecto a la bebida, si tu no respetas eso ¿porque narices tengo que contarte lo que quieres saber?
-Te recuerdo que me la suda vuestro pacto. Mira, Sonia, sólo quiero saber que pasó y ya está, no vengo a hacer vida social contigo.- Sonia volvió a ponerse su auricular y quitó la vista de mi, pero necesitaba saber lo que pasaba y ahora si que estaba segura de que ella sabía algo. Me estaba poniendo histérica así que quité su casco de su oreja junto con el iPod a lo que me miró bastante mal.
-¿Que coño haces?
-O me lo dices o le digo a Jay que te escapaste el sábado y así mandas a la mierda tu actitud de hija responsable.
-¡Te miran así porque eres una cualquiera! Llegas a una fiesta con un chico y acabas en la cama con otro, por eso te miran y te critican. Querías saberlo, pues ala ya lo sabes, ahora devuélveme mi iPod - Levanté una ceja y la miré fija.
-Espera, espera, ¿que me acosté con alguien? ¿Con alguien que no era Harry?
-Si, ¿necesitas un esquema para entenderlo?
-Necesito un esquema para que me digas qué chico fue.
-¿De verdad no te lo imaginas? Piensa un poco, aunque se que te cuesta
-Mira, Sonia, me estás cabreando demasiado, y no soy consciente de mis actos. ¿Quieres ir al grano de una maldita vez?
-Niall joder Niall- Mis ojos se abrieron como dos platos nada más escuchar ese nombre. No, no podía ser. Era mentira, era una broma de todos. Joder, soy imbécil, la persona más imbécil del mundo. Le tiré el iPod a Sonia y me fui, necesitaba aislarme, y ahora mismo, no era en el colegio.

Narra Sonia

Después de la confesión a mi prima y de su arrebato volví a clase y aunque esperaba encontrármela allí con su típica cara de malas pulgas no estaba. Pasaron las horas, llegó el momento de salir y Carla no había aparecido. Me dirigía hacia el aparcamiento para volver a casa con mi hermano cuando alguien me agarró del hombro.
-Sonia- me giré y vi a Niall
-¿Que?- dije todo lo seca que pude, no tenía porque hablar bien a ninguno de ellos, ellos llevaban años tratándome mal
-¿Donde esta Carla? No la he visto desde el patio y me dijo que tenía que hablar contigo
-Si habló conmigo y desapareció yo tampoco sé donde está
-¿Que le dijiste?
-Lo que deberías haberle dicho tu
-Joder Sonia no me digas que se lo has contado- ahora iba a ser mi culpa
-Se iba a enterar igualmente y no me quedaba otra opción
-Joder, joder y joder, Sonia de verdad!!!- salió corriendo supongo que para ir a buscarla
Llegué a mi coche y Lou estaba apoyado en el capo.
-Casi llegas hermanita ¿y Carla?
-Otro- dije de mala leche- No se donde esta Carla, no soy su puta niñera
-Te quieres tranquilizar
-No, no quiero joder, que parece que cuando no saben a quien echarle la culpa me la echen a mi
-¿Que ha pasado?- Se lo conté todo desde lo que pasó en el patio hasta mi charla con Niall- Sonia me dijiste que no se enteraría
-Lo sé, pero me amenazó joder, bastante la he cagado ya con mamá
-Vale tranquila, tarde o temprano tiene que aparecer. por cierto he estado con Liam
-Ah que guay- dije mirando la carretera
-Está preocupado por ti
-Pues dile que no lo esté, que se preocupe de él y de su novia
-¿Que novia?
-La que estaba con él el otro día en el patio
-Sonia, Liam no tiene novia, esa chica lleva detrás de él no sé el tiempo, el mismo tiempo que lleva él dándole largas, pero espera un momento ¿estas celosa?
-¿Celosa yo? ¿de que?- Louis rió
-Enana que a mi no me engañas
-Que me dejes Louis de verdad no estoy de humor
-Vale, vale lo que tu digas, pero en serio Liam es un buen tío, porque no quedas con él, sabes perfectamente que él nunca se ha metido contigo
-No, pero va con los que si que lo han hecho
-Va dale una oportunidad, mira lo llamo y le digo que venga a casa y así estudiáis juntos, solo estudiar
-Louis que no!
-Vamos hazlo por mi! Solo inténtalo....
-No vas a parar hasta que acepte ¿verdad?
-Que bien me conoces
▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼▲▼
Una vez más aquí tenéis capítulo nuevo, la historia cada vez tiene mas forma, ¿que pensáis  ¿os gusta? Nos encanta que nos dejéis comentarios, aun no hemos recibido ninguno por aquí, pero sabéis que estamos en twitter y si os gusta os agradeceríamos que recomendéis la historia y ya callamos. Os queremos!