Narra Sonia
No
tengo ni idea de a que hora llegó Carla, la verdad es que me había
reconfortado su abrazo y el contarle como me sentía la tarde
anterior, pero cuando llegó volví a apesta a alcohol y tabaco. Me
levanté y ella ya no estaba en la cama, así que me vestí y bajé a
desayunar mis hermanas no paraban de reír por algo que les había
hecho Louis, Carla estaba sentada comiendo algo, o al menos haciendo
como que comía, yo llegué y me senté delante del tazón de leche
que me había preparado mi madre, la cual vino y apoyando sus manos
en mis hombros me dio un beso en la mejilla.
-Buenos
días cariño
-Buenos
días mamá
-Ayer
ni siquiera saludaste al llegar
-Ya,
lo siento, estaba cansada- Miré a Lou que me observaba con cara
preocupada, yo le sonreí, para tranquilizarlo
-Bueno,
pues me da igual, darle un beso a tu madre no te cuesta nada
-Vale
mamá, prometo que no volverá a pasar
-Ya
he terminado, ¿nos vamos?- dijo Carla levantándose, todos miramos
hacia su plato y no había comido nada.
-Carla,
cariño, deberías comer más- le dijo mi madre recogiendo su plato
-Vale,
lo siento, lo intentaré. ¡Vámonos!
-Venga
vamos- dijo Lou levantándose también. Yo hice lo mismo y tras coger
mi mochila nos fuimos hacia el colegio
Llegamos
justos de tiempo, por lo que Lou salió corriendo hacía su clase y
nosotras hacia la nuestra, donde por suerte el profesor aun no había
llegado. Me dirigí a mi sitio mientras Carla se fue hacía donde
estaba Harry. Decidí levantarme e ir para allá también.
-Hola.
dije saludando a mi prima con una sonrisa de oreja a oreja
.Ella
se giró junto con Harry y otros chicos y me miraron mal, ella la que
más.
-¿Qué
quieres?- preguntó Carla.
-No,
nada, es que.....-no sabía que decir, ¿porque soy tan idiota?
-No es que nada. No
sé por qué viene aquí intentando ser mi amiga cuando no tengo el
mínimo interés de serlo- Harry y el resto se empezaron a reír y yo
solo quería desaparecer- Venga, piérdete.
-Me di media vuelta y volví a mi sitio donde empecé a sacar las
cosas de mi mochila. Me quería morir de vergüenza, una vez mas
había hecho el ridículo delante de todos. Después de lo de el día
anterior por la tarde yo pensaba.....bah que mas da, había vuelto a
ser la misma idiota de siempre. Mejor me quedaba en mi esquina sola.
El
profesor de matemáticas entró y Carla se sentó a mi lado mientras
intentaba ocultar una sonrisa. Miré hacia alrededor y vi como Harry
no dejaba de mirarla, también me di cuenta como Niall la miraba, yo
diría que demasiado, pero ella no le hacía caso.
Narra
Carla
El
recreo empezaba y ya veía como mi prima se iba a su esquina
solitaria de siempre. Pasé de ella, porque la verdad es que me
importaba una mismísima mierda. Caminé y me senté en un banco
mientras veía como Harry jugaba al fútbol. Me aburría pero no
tenía nada más que hacer, hasta que vi que alguien se sentó a mi
lado.
-¿Estás
sola?- preguntó.
-No,
Niall, verás, te acabas de sentar encima de mi amigo invisible, pero
nada, eh, no importa- él rió y pude ver como tenía una sonrisa
prec.. ¿Qué coño estaba a punto de decir? Carla, cállate.
-¿Puedo
hacerte una pregunta?- me encogí de hombros- ¿Qué te traes con
Harry?- me di la vuelta para mirarle.
-¿Te
importa?
-Sí-
su respuesta me impresionó- Bueno, la verdad es que, no sé, acabas
de llegar nueva al colegio y ya estás con alguien, no sé, no se
dicen buenos comentarios sobre ti- me reí.
-¿Y
te crees que me importa?- pregunté poniéndome de pie- ¿Te crees
que me voy a poner a llorar por lo que las personas digan de mí?
¡Que digan lo que les dé la gana! Que digan que soy una puta, una
zorra, ¡lo que quieran! Que a mí me da igual. Y tu, Niall- me
acerqué mucho a él, ya que estaba de pie también- Ni se te ocurra
volver a preguntarme sobre mi vida privada, porque ese no es asunto
tuyo, ¿vale?- y me fui dejándolo solo. Imbécil.
Las
clases habían acabado y hoy había quedado con Harry en su casa ya
que no iba a haber nadie. Sí, podéis pensar mal.
Estábamos
en el salón viendo la tele hasta que empezó a sacar tema de
conversación.
-Carla,
cuéntame algo de ti- le miré levantando una ceja.
-¿Qué
quieres saber?
-No
sé, vives con tu tía y tus primos. ¿Dónde vivías antes? ¿Y tus
padres? No sé, ¿tienes hermanos?- había tocado mi punto débil, y
no quería ponerme a llorar.
-Mira,
¿sabes qué? No hablemos ahora de eso y hagamos lo que vinimos a
hacer- Harry rió y apagué la tele. Él me cogió de la nuca y
empezó a besarme, hasta que crucé su cintura con mis piernas. Le
quité la camiseta y empecé a besar su cuello. Cada vez tenía más
calor pero no podía quitarme de la cabeza sus palabras. Todos los
recuerdos de mi infancia habían venido a mi cabeza y en cualquier
momento iba a echarme a llorar. Harry estaba a punto de sacarme la
camiseta pero le detuve.
-No,
Harry, no puedo, de verdad, lo siento.
-¿Pero
qué pasa?- me puse de pie, me arreglé y me dirigí hacia la puerta.
-Te
veo mañana en clases- y me fui. Harry había salido fuera de casa
sin camiseta y todo gritando mi nombre pero yo no le contesté.
Incluso me fui corriendo para que no me alcanzara. No podía ser que
ahora todos esos recuerdos, esos malos recuerdos no quisiesen irse de
mi mente. Llegué a un parque y lo único que quería era beber. Lo
necesitaba, quería quedar inconsciente para no recordar eso jamás.
Era por eso que bebía, para olvidar todo, pero no, aún así lo
recordaba. Daba vueltas por el parque mientras me pasaba las manos
por la cabeza. Me estaba volviendo loca, joder. No tenía dinero,
nada, ni siquiera algún cigarro, justo ahora que lo necesitaba,
joder. Tampoco quería entrar a robar, sobretodo por si me
reconocían, y joder, quería morirme ahora mismo.
Me
senté en un banco de manera en que quedaba abrazada a mis piernas.
Las lágrimas empezaban a bajar por mis mejillas y era lo que más
odiaba, llorar.
-¿Carla?-
una voz me sacó de mis pensamientos- Carla, ¿estás bien?- era
Niall.
-Niall,
dame dinero, por favor, lo necesito- dije levantándome y cogiéndole
por la camiseta. Él me miró extrañado pero no me lo dio.
-¿Para
qué? Carla, ¿estás bien? ¿Qué te pasa?
-¡Solo
dámelo, joder!
-¡No
me grites! ¡No te lo voy a dar hasta que me digas para qué! Y
primero, tranquilízate, joder.
-¡Imbécil,
vete a la mierda! ¡Ese no es tu problema!- y me di media vuelta pero
su brazo me retuvo.
-No
te vas hasta que me cuentes qué te pasa- le miré desafiante y me
solté de su brazo.
-Me
voy si me da la gana. Ya te dije que no te lo iba a decir- volví a
darme la vuelta pero Niall me cogió de tal manera que parecía un
saco de patatas en sus hombros- ¡Suéltame, Niall, joder, suéltame!
-No,
calla y deja de patalear, venga, vamos.
-¡Me
están secuestrando, me quieren violar, ayuda, ayuda!.La gente miraba
fatal a Niall, incluso sé que se estresó porque me bajó.
-¿Eres
tonta?- yo reía- Sí, lo eres. Vamos a un lugar donde podamos
hablar, quiero saber qué te pasaba.
-Y
yo ya te he dicho- dije acercándome mucho a él, yo diría que
demasiado, tanto que quedaban centímetros entre nuestros labios- Que
no te voy a decir nada. ¿Sabes? Me voy a mí casa. Tengo sueño- y
salí corriendo. Escuché que gritaba mi nombre pero tampoco le hice
caso. Tampoco me fui a mi casa, solo me perdí por ahí.
Narra
Sonia
Después
de clase volví a casa con Lou en el coche, al parecer Carla había
quedado, supongo que con Harry, pero me importaba mas bien poco
-Soni
¿estas bien?- preguntó Lou mientras conducía
-Si-
le sonreí como pude- Todo bien
-Sabes
que yo te creo ¿verdad?- asentí- Y que voy a ir a buscar a ese
malnacido
-No
lo hagas
-¿Que
no haga el que?
-No
lo busques Lou, por favor, déjalo, ya está pasó, el que lo crea
bien, y el que no también, pero no te metas en líos por mi, por
favor, no lo hagas
-Mira
Sonia no puedo ver que le hacen daño a mi hermana y dejarlo pasar,
lo siento pero no, sé que aveces la he cagado también, no debería
de haberte dejado sola el otro día
-No
fue tu culpa
-Si,
si que lo fue. Fui yo el que te llevó allí y el que se comportó
como un egoísta dejándote sola
-No
Lou, no siempre vas a estar ahí para defenderme, tengo que aprender
a soportar lo que venga y a defenderme cuando tenga que hacerlo
No
hablamos más durante el resto del viaje, cuando llegamos a casa fui
a saludar a mi madre, cada uno le dio un beso y nos sentamos a comer
con ella.
-¿Dónde
está Carla?- preguntó ella
-Había
quedado con Harry- contestó Louis con cierto odio hacía el nombre
de su amigo, después de no creerme no le había vuelto a dirigir la
palbra
-¿Ella
sola con Harry?
-Si
mamá, déjala, esta intentando hacer amigos
-Ya,
ya, pero es que me preocupa, sale sin avisar, desaparece y no sabemos
nada de ella hasta altas horas de madrugada. Tendré que hablar con
ella
-No
creo que sirva de nada- dije mirando mi plato de comida
-¿Porque
dices eso cariño?
-Pues
porque si mamá, ella es así, le gusta hacer lo que quiere cuando
quiere y no creo que acepte las normas, no creo que nunca antes se
las hubieran puesto
-Pues
tendrá que aprender, ahora vive aquí y es una mas- me encogí de
hombros
Al
acabar de comer me fui a mi habitación y cuando ya estaba preparada
para empezar a estudiar alguien tocó a mi puerta y vi la cabeza de
mi hermana Lottie asomandose.
-Soni
te necesito- le sonreí, daba igual como hubiera sido mi día, no
podía tratar mal a mis hermanas, no quería que ellas se sintieran
mal nunca, no podría perdonarme saber que una de ellas ha pasado lo
mismo que yo.
-¿Que
pasa?
-Solo
ven, reunión de hermanas- Me levanté del escritorio y la seguí
hasta su habitación y la de Fizzy donde estaban las otras tres. Me
senté en la cama y en un instante tenía a Daisy entre mis piernas.
-¿Que
estáis tramando?-pregunté
-Ayer
vimos a Louis viendo los anuncios de "The X Factor"- dijo
Fizzy
-Si
bueno a él le encanta el programa ya lo sabemos
-Queremos
convencerlo de que vaya- me dijo phoebe
-Si,
siempre lo oímos cantar- dijo Daisy
-Soni
tu eres la que mejor se lleva con él, ayúdanos- me pidió Lottie
-Chicas,
lo veo difícil, ya sabéis que ni siquiera quiere cantar en público
-Porfiiiii-
dijeron las cuatro a la vez
-Esto
lo teníais ensayado?- rieron- Bueno aun nos queda tiempo, dejarme
pensar ¿vale?- asintieron- Y ahora a hacer deberes antes de que mamá
suba, o peor que Lou nos descubra
Me
dirigí a mi habitación y al entrar di un pequeño bote al ver a mi
hermano tirado en mi cama.
-¿Que
haces aquí? Me asustaste
-¿Dónde
estabas?
-Ayudando
a Lottie con unos ejercicios del colegio
-¿Que
estáis tramando las 5?
-Nada,
ya te he dicho que la estaba ayudando
-Bueno
da igual, yo también necesito ayuda con unos ejercicios de química
-Lou
me sacas un año, estas en segundo, se supone que más avanzado que
yo
-Pero
yo sé que mi hermanita es muy lista y me podrá ayudar
-Pelota-
sonrió con esa sonrisa que me encantaba, que me hacía sentir bien.
Trajo su libro y su libreta y efectivamente sabía hacerlo.
Estábamos
los dos riendo ante la incapacidad de Lou para entender lo más
simple del ejercicio cuando la puerta se abrió, ambos nos giramos
para ver aparecer a mi prima, la cual ni saludó, se tiró en la cama
boca abajo
-Hola
a ti tambien- dijo Louis
-Podéis
seguir haciendo lo que sea que estabais haciendo. Hacer como que no
existo, como que me he muerto.
-Será
fácil- contesté y me llevé un codazo de mi hermano
-Creo
que mamá quería hablar contigo
-Pues
que bien.
-Deberías bajar- no entendía como Louis podía seguir hablándole como nada
con esas contestaciones . Carla bufó y se fue, seguramente a buscar
a mamá.
-Como
lo haces Lou?
-¿El
que?
-Aguantarla,
cada vez que te contesta así.....la odio
-Ya
te dije que habría que aguantar un poco
-Ojala
se fuera por donde ha venido- Louis me miró con cara triste y yo no
entendía porque, era la verdad, no había mejorado nuestras vidas,
en todo caso las habría empeorado
Narra
Carla
Bajé
las escaleras para no tener que seguir aguantando a mis dos queridos
primos. Fui a la cocina y allí estaba Jay haciendo una tarta.
-Jay,
¿me buscabas?
-Carla,
cariño, sí, ven siéntate- me indicó una silla y así hice- Verás,
estos días he notado cosas en ti muy raras. No comes casi, y eso me
preocupa mucho. Además que, al llegar de colegio te vas y llegas a
las tantas horas de la madrugada y me gustaría saber qué haces esas
horas fuera de casa. No podía creer que me estaba preguntando esto.
Nunca había dado explicaciones de donde estaba, y no iba a empezar
ahora.
-Lo
siento, Jay, pero todas esas son cosas que siempre he hecho. Salir
por ahí y perderme. Siento si no te gusta pero es lo que siempre
hago, y no creo que cambie ahora que tengo 17 años. Además, no me
gusta comer.
Ya,
Carla, lo entiendo, pero debes entender que ahora vives aquí, en
otra casa, y tienes otras normas, y esas son decirme a dónde vas y
con quién. Además, Lou me ha dicho que te gastaste muy rápido el
dinero, y quiero saber en qué.
-En
comida.
-Pero
si me acabas de decir que no te gusta comer.
-Mira,
Jay- me levanté. me estaba enfadando mucho- Lo siento sino te gusta
mi actitud o cualquier cosa, pero soy así. No voy a cambiar. No me
gusta estar todo el día en casa estudiando porque no soy así. Me
gusta salir y conocer a personas. Y sino te gusta puedes mandarme a
un reformatorio.
-Carla,
yo.. Yo no quería que te pusieras así. Entiendo que estás pasando
por momentos muy difíciles, tu madre ha muerto y yo solo quiero
ayudarte, y para ello debes decirme qué te pasa.
-Estoy
bien, es solo que echo de menos a mi madre- mentí- Pero ya está.
Voy a ducharme, ¿sí?
-Vale,
cariño- besó mi cabeza y me fui. Qué día tan asqueroso estaba
siendo el de hoy. No quería ir a clases mañana. Sobretodo porque
vería a Harry y a Niall y ambos me estresarían a preguntas.
Narra
Sonia
Al
fin había conseguido que mi hermano entendiera un par de ejercicios,
alguien debía enseñarle que la cabeza no esta solo para levar pelo.
Estaba concentrada ahora en mis deberes de Matemáticas cuando mi
prima entró en la habitación. La miré y vi que tenía los ojos
rojos y al parecer era de haber estado llorando, no se si debería
pero lo hice, le pregunté.
-¿Carla
estás bien?
-Sí.
-¿Has
llorado?
-No,
Sonia, estoy bien.
-Bueno
como quieras. ¿Hablaste con mi madre?
-Sí.
-¿Que
te dijo?- sabía lo que le había dicho, pero quería oírlo
-Joder,
¿qué es esto? ¿Un interrogatorio? Ese no es tu problema.
-Tranquila
eh, simplemente me estaba interesando por ti- Giré
mi silla y volví a mis deberes
-Pues
no lo hagas porque no necesito que nadie se interese por mí.
-De
vez en cuando deberías saber aceptar el cariño
-¿El
que tú no recibes y te gustaría recibirlo? No, gracias, estoy bien
así.
-QUIERES
DEJAR DE METERTE CONMIGO DE UNA PUTA VEZ! Créeme ya hay suficiente
gente que lo hace
-¡¿Quieres
dejar TÚ de meterte en mí vida?! ¡No te aguanto y me tienes harta!
Déjame en paz, que más te da si lloré, si estoy borracha o
drogada, ¡déjame en paz, joder! -No sabía como contestar a
aquellas palabras, pero me sentía identificada, eran parecías a las
que yo había dicho la tarde anterior
-El
problema es que yo al menos intentaría despertarte.....
-Pues
no te molestes en hacerlo.
-No
entiendes nada- dije cogiendo ropa y yéndome al baño a ducharme
-Tu
menos.
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